Papas: alianza público privada apuesta por la seguridad alimentaria

La papa es el segundo alimento más consumido por los chilenos, tanto en cantidad como en calorías, según el Informe de Valor de la Canasta Básica de Alimentos y Líneas de Pobreza de la Subsecretaría de Evaluación Social 2022, siendo un producto importante en la dieta de los chilenos. Además, es el cuarto cultivo más sembrado en superficie, y cuya producción es destinada casi totalmente al mercado interno. Anualmente se cultivan entre 35 mil y 40 mil hectáreas, siendo además el cultivo que tiene el mayor número de agricultores, alcanzando 24.506 unidades productivas agrícolas (UPAs), según el VIII Censo Nacional Agropecuario y Forestal.
En este contexto, La Araucanía tiene mucho que decir, porque la producción de papa en Chile se concentra en el sur en manos de pequeños agricultores, muchos de ellos Mapuche, particularmente de la zona Costa Araucanía, que aglutina las comunas de Carahue, Saavedra, Toltén, T. Schmidt, Nueva Imperial, Gorbea y Freire, que concentran 6.809 productores (Censo agrícola 2022), lo cual da cuenta de la importancia económica y social de este cultivo para el territorio. Estas comunas, junto al SAG e INDAP, forman parte del Convenio Tranapuente, alianza público privada que lidera INIA Carillanca en La Araucanía, cuyo principal objetivo es la producción de papa semilla, la capacitación de productores y equipos técnicos y la investigación y desarrollo del cultivo, donde el rol de los municipios ha sido vital, gracias al aporte en recursos y la articulación con los productores y sus equipos técnicos.
Entre el período 2017-2022 gracias al apoyo del Gobierno Regional, tanto el convenio como las instalaciones del Centro Regional de la Papa INIA en Tranapuente (Carahue), han permitido fortalecer el rubro, potenciando la sustentabilidad alimentaria y apoyando a la pequeña agricultura Mapuche que sustenta su producción en este noble y estratégico producto alimenticio.
La estrategia de producción de papa semilla utilizada por el Convenio Tranapuente y el programa GORE ejecutado hasta fines de 2022, ha permitido un sistema de escalamiento de papa semilla participativo que se inicia en el Centro Experimental INIA Tranapuente con la producción de minitubérculos los cuales se llevan a campo para su multiplicación y posterior entrega a los agricultores de las comunas participantes.
“Es así como, durante las temporadas 2021 y 2022 el traspaso de papa semilla hacia los beneficiarios finales alcanzó 155 mil 225 kilos de semilla, beneficiando directamente a 177 productores. Este modelo ha permitido el establecimiento de 38 hectáreas de semilleros certificados entre las temporadas 2019-2022 y 35 hectáreas de semilleros corrientes entre los años 2021 y 2022. De esta forma se busca aumentar la disponibilidad de este insumo crítico para el cultivo de papa, que además permite resguardar el área libre de producción de papa en Chile (resolución exenta 3276 de 2016 del Servicio Agrícola y Ganadero). En forma paralela, a partir del 2023 se dio inicio a la producción de semilla de legumbres, específicamente arvejas y porotos, con una producción de 3000 kilos, con los cual se espera llegar a 150 productores”, explica Patricio Méndez, profesional de INIA a cargo del Centro Experimental en Tranapuente.
El objetivo de trabajar con legumbres es para intervenir los sistemas productivos de cultivos anuales que desarrollan los pequeños productores del territorio, debido a que son parte importante y una alternativa en la rotación de cultivos.
“Son indiscutibles los beneficios de la incorporación de leguminosas en la rotación de cultivos además de ser estratégicos para la seguridad alimentaria de la población. Estos permiten una producción más sustentable al contribuir a mejorar la sanidad de los suelos así como aportar nitrógeno a los cultivos sucesivos, dijo finalmente Gabriela Chahín, directora regional de INIA Carillanca.
En forma paralela, a partir del 2023 se dio inicio a la producción de semilla de legumbres, específicamente arvejas y porotos, con una producción de 3000 kilos, con los cual se espera llegar a 150 productores.
“Este trabajo ha permitido mejorar la calidad productiva de nuestros agricultores en un rubro tan importante y estratégico como la papa, y ahora nos hemos ampliado a las leguminosas, que es un rubro importante para nuestros pequeños agricultores. Este es un modelo único, pues estamos preocupados de la calidad de la semilla de nuestros productores y eso lo hace distinto, por eso unidos hemos ido avanzando, mejorando infraestructura y disminuyendo los procesos de producción de semilla de papa, complementando con la permanente capacitación a nuestros equipos técnicos que están con el agricultor en el campo”, dijo Juan Paillafil, alcalde de Saavedra y Presidente del Convenio Tranapuente.
Cabe indicar que la capacitación de productores y equipos técnicos, como también la validación de tecnologías en nutrición, control de malezas, riego, comportamiento varietal y manejo de enfermedades, tanto de papa como en leguminosas es un tema permanente, donde INIA Carillanca transfiere los conocimientos de sus distintos profesionales especialistas. De esta forma se ha acercado la tecnología de punta a productores Mapuche del borde costero y los equipos técnicos que se desenvuelven en el ámbito de la Agricultura Familiar de La Araucanía.
Productores agradecidos
Mariela Concha, es jefa de hogar y productora del sector Loncoyamo de la comuna de Carahue, quien está ligada al convenio y ha sido usuaria durante una década. Con 6 hijos a los que tuvo que criar sola, luego de su separación, el trabajo con INIA Carillanca y el Convenio Tranapuente le ha dado estabilidad.
“Tengo un semillero de papa de 3 hectáreas, agradezco el apoyo y la asesoría 24/7 de los profesionales del Centro de INIA Tranapuente. He podido crecer, procesar y vender semilla, con todo lo que ello implica, pues el proceso es muy esclavizante y caro. Yo llegué sabiendo sembrar papa, pero luego de una década conozco las variedades, he aprendido a diferenciar enfermedades, tengo herramientas para potenciar el rubro aplicando las nuevas tecnologías. La capacitación ha sido vital para avanzar, donde creo que la disciplina y el interés de los agricultores de papa debe seguir creciendo. Este rubro y todo lo que he avanzado me permite hoy tener una seguridad económica, salir de mis deudas, mejorar mi calidad de vida y la de toda mi familia”, puntualiza.
Por su parte, Miguel Fonseca del sector Quiripio y miembro de la Sociedad Agrocomercial Carahue (AGROPOÑI S.A), plantea el valor que tiene para los productores de papa el Convenio Tranapuente, donde lleva 20 años aprendiendo.
“Tengo un semillero de papa de 6 hectáreas. Ser usuario de esta iniciativa, que lidera INIA y los municipios me ha significado mejorar rendimiento y calidad de la papa. Antes la semilla usada era ineficiente y había mucho descarte, hoy contamos con mejor semilla y eso ha impactado de verdad en el territorio. Gracias a las capacitaciones he aprendido a conocer distintas variedades de semilla y cómo hacer un buen manejo, y sobre todo, gracias al convenio mejorar mis ingresos, poder ahorrar para la vejez, tener un poco de seguridad en caso de dificultades. Todo el trabajo es por el bien de mi familia, mi esposa y mis 2 hijos”, acotó.
Valioso trabajo del Convenio Tranapuente, alianza virtuosa público-privada, que es sustento técnico y productivo para el territorio Costa Araucanía, una zona de rezago, donde la pequeña agricultura, particularmente Mapuche, ha visto resultados en la producción de papa y por extensión han visto mejorada su calidad de vida.