La brotación de los tubérculos

Antonio Villagra, Asesor Técnico Comercial, Stoller de Chile S.A.

Un tubérculo de papa cumple la función principal de ser una estructura de reserva en la planta de papa, en él se almacena toda la energía que la planta logró capturar durante la temporada en forma de cadenas compuestas por Carbono, Hidrógeno y Oxígeno (Carbohidratos), y por lo tanto le asegura a la planta la subsistencia durante períodos de estrés. Por ejemplo posterior a un evento de helada, es frecuente observar que los tubérculos pierden peso y calibre (“enflaquecen”), ya que se produce un movimiento de energía desde los tubérculos hacia el resto de la planta para gastar esa energía que por la vía de la fotosíntesis no está pudiendo obtener; de ahí la importancia de estimular a salir de esa situación de estrés lo antes posible.

Pero los tubérculos además no solo constituyen una fuente de energía, si no que también permiten perpetuar a la planta en el tiempo en temporadas posteriores. De ahí que nosotros nos valemos de esta cualidad para plantar los tubérculos en cada nueva temporada, manteniendo por lo tanto las características fenotípicas que deseamos según cada variedad.

Ahora bien, un aspecto que deberíamos preguntarnos es como hacemos para lograr que estos tubérculos logren entregarnos plantas sanas, vigorosas y productivas nuevamente cada vez. Una de las estructuras del tubérculo en el que deberíamos poner atención para lograr este objetivo es en las yemas que posee, pues son éstas las que dan origen a su vez a otras estructuras, los tallos en la futura planta. Viéndolo así, mientras más tallos obtengo en la hectárea, debería aspirar a un potencial productivo por lo tanto también mayor.

Las yemas se ven influenciadas por bastantes factores a la hora de brotar, siendo algunos de los gatilladores de estos procesos fisiológicos por ejemplo el grado de madurez de las yemas (definido en la temporada anterior), niveles bajos de ácido abscísico (degradados durante el invierno) y niveles más altos de las hormonas juveniles o “primaverales” como las citoquininas, auxinas y también las giberelinas. Estas hormonas se comienzan a producir en las yemas cuando las condiciones de temperaturas de suelo y humedad comienzan a ser las óptimas para promoverlas, de ahí que suelos fríos y excesivamente húmedos (anegados) no permiten la concentración hormonal óptima, y se nos dan entonces emergencias tardías y desuniformes. Éste análisis adquiere mayor relevancia aún en aquellas plantaciones en que el tubérculo es colocado a mayor profundidad y/o con aporcas tempranas.

Por lo tanto desde el punto de vista productivo, sería conveniente que podamos suplementar de manera externa con estas hormonas involucradas en los procesos de brotación de las yemas, de manera de tener mayor seguridad a la hora de proyectar la uniformidad de la brotación y la cantidad de tallos que queremos obtener.

Una alternativa que ha demostrado resultados eficaces en este sentido, sobre todo como decíamos en condiciones adversas como lo son los suelos de nuestra zona sur es el uso de Vigorseed Papa®, único producto que considera justamente una suplementación adecuada en concentración y óptima en relación entre las hormonas participantes en estos procesos. Considerando el uso de esta tecnología podremos al menos estar más tranquilos de que por la vía hormonal estaremos teniendo una mejor brotación.

LA IMPORTANCIA DEL CALCIO

Continuando con la mirada puesta en una mejor partida de nuestro papal, es que debemos también poner atención a nuestra estrategia desde el punto de vista nutritivo. Es así que desde hace bastante tiempo ya, se ha considerado importante el suministro de algunos nutrientes en el cultivo de la papa, como lo son el Nitrógeno, Fósforo, Potasio y algunos otros microelementos; sin embargo un nutriente que no muchas veces es considerado es el nutriente que le da la estructura a la planta, el Calcio. Sin embargo vale la pena ponerse a pensar sobre sus beneficios y darle una vuelta a si convendría o no hacer un uso mas agresivo de este elemento.

Algunos de los atributos del Calcio son los de tener participación en procesos fisiológicos claves, como lo es el ser el mensajero de las señales hormonales auxínicas y citoquinínicas para permitir la división celular, por lo tanto el crecimiento. De ahí que suministros mas grandes y disponibilidades inmediatas de Calcio en la plantación nos aseguran un desarrollo inicial también mucho mejor.

Por otro lado el Calcio también participa en la estructura de membranas y paredes celulares en toda la planta, permitiendo así que ésta mantenga una forma rígida (lo que vendría siendo el símil al esqueleto en nosotros los animales, también conformado por Calcio). Esto tiene vital importancia si pensamos que los brotes deben abrirse paso a través del suelo, y luego deben mantenerse en la planta con su estructura durante toda la temporada. Estructuras mas pobres en Calcio tenderán a debilitarse con mayor rapidez y frecuencia, y luego se deshidratarán también mas fácilmente (por una menor resistencia a la salida del agua) marchitándose en situaciones de estrés por temperatura/radiación.

Desde el punto de vista sanitario también es fundamental, ya que la entrada de patógenos a tejidos débiles es mayor. La experiencia y los resultados de ensayos han mostrado en forma evidente la disminución del desarrollo de enfermedades de hongos en papales con una alta disponibilidad de Calcio.

Finalmente el Calcio también nos permitirá una condición y presentación de los tubérculos también mejor, es decir pieles mas gruesas, firmes y tonalidades mejores de color (en el caso de las variedades rojas). Se puede afirmar que quizás es la manera mas efectiva en el logro de coloraciones rojas óptimas de la piel.

De todo lo anterior entonces es que se hace interesante por lo tanto evaluar el uso de tecnologías que nos permitan un suministro temprano de Calcio, en ese sentido el producto Fla-Calmag 2/10® se presenta como una muy buena alternativa. Diseñado con una carbamida cálcica (molécula patentada por la compañía Stoller), permite una disponibilidad inmediata y una alta facilidad de ingreso a través de las raíces de la planta. Estas dos características lo presentan como el Calcio de mayor efectividad vía suelo, logrando optimizar los parámetros productivos antes mencionados. De decidir hacerlo, debemos pensar en colocar entre 100-200L/há en el surco de plantación (puede ir junto con el fungicida que se esté aplicando).

Si consideramos que según algunos autores (Boguslawski, 1981; Beukema, 1979; y varios otros) para la producción de 1 tonelada de tubérculos de papa necesitamos alrededor de 3 unidades de Calcio, por lo tanto se hace necesario que le demos una segunda vuelta en la planificación de nuestra fertilización.

Por: Antonio Villagra, Asesor Técnico Comercial, Stoller de Chile S.A.